
Enfadarse repetidamente, pegar, zarandear o gritar a los niños está relacionado con estructuras cerebrales más pequeñas en la adolescencia, según un nuevo estudio publicado en Development and Psychopathology por de la Universidad de Montreal (Canadá) en colaboración con investigadores de la UniversidaLeer más
Introducción. Los niños con trastorno del espectro autista (TEA) a menudo experimentan el cambio de rutinas como un desafío importante. La necesidad de adaptación durante la pandemia por la COVID-19 puede haber causado problemas a estos niños.